Se le está dando valor por diversas razones: es apto para cualquier área y contenido, resulta útil para los distintos niveles educativos y es adecuado para todos los alumnos.
Esta forma de trabajar permite que unos aprendamos de los otros, sacando los puntos fuertes de cada uno para conseguir una meta y un fin en común.
Esta metodología activa, así es como se denomina, donde el alumnado es el protagonista de su aprendizaje, deja atrás el rol del educador como instructor y el papel del niño/a como mero receptor de contenidos.
La técnica utilizada hoy, ha sido, el folio giratorio, en grupos base de tres personas, hemos tenido que completar el camino hasta la Catedral de Santiago, de uno en uno vamos completando el camino siguiendo una serie de dos colores, cuando pones el gomet que te toca pasas el folio al siguiente compañero.
Era la primera vez, que trabajábamos con esta técnica y el resultado ha sido muy satisfactorio, les ha gustado trabajar en equipo y en un momento le han pillado el truquillo.
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